Surgimiento de ASFADDES

HISTORIA DE ASFADDES

 Por: Jessica Gutierrez Duarte

LA ASOCIACIÓN DE FAMILIARES DE DETENIDOS DESAPARECIDOS (ASFADDES)  UNA LUCHA DE RESISTENCIA Y PERSISTENCIA QUE LLEVA MAS  DE 31 AÑOS,

La Desaparición Forzada en Colombia,  comienza  a aplicarse en el marco de la doctrina de la seguridad Nacional, a finales de la década de los setenta, incrementándose en la década de los ochenta, como modalidad  represiva y sistemática para eliminar opositores políticos y como  mecanismo de represión, cuando se institucionaliza la violación de Derechos Humanos en este país.

El primer caso registrado como desaparición forzada en Colombia y reconocido como modalidad  represiva para eliminar opositores políticos al régimen, se remonta al 9 de septiembre de 1977,  con la detención desaparición de Omaira Montoya Henao, bacterióloga de 30 años, con tres meses  de embarazo y militante de izquierda.

En estas dos décadas este crimen atroz se caracterizó por ser selectivo, previa vigilancia,  seguimientos, operativos de inteligencia y ejecución por parte de organismos de seguridad del  Estado sobre las víctimas. 

Al no encontrar respuesta ni negociación alguna por parte de entidades del Estado,  dichos familiares de los  detenidos- desaparecidos toman la decisión  de organizarse como la  Asociación de Familiares de Detenidos- Desaparecidos ASFADDES el 4  febrero de  1983.

ASFADDES cuenta con el apoyo de una entidad latinoamericana llamada FEDEFAM (Federación Latinoamericana de Asociaciones de Familiares de Detenidos – Desaparecidos), adicional a ello refieren  con el apoyo de la ONU cuya labor se enfoca en defender los derechos humanos y que estos a su vez no se vean vulnerados por entidades, gubernamentales.

La forma más recurrente para hacerse escuchar ASFADDES es presionando mediante ayunos, marchas, plantones, diálogo e interacciones con los distintos representantes del gobierno (senadores, representantes a la cámara y el parlamento andino).  Esta es una labor difícil de llevar acabo, por las dificultades, económicas, sociales y en ocasiones culturales que se presentan a menudo. El  10 de julio de 2000 se aprueba la ley 589 “Julio 6, por medio de la cual se tipifica el genocidio, la desaparición forzada, el desplazamiento forzado y la tortura”, después de 12 años de lucha, contra la desaparición forzada.

Con la aprobación de la ley 975 del año 2005, Justicia y Paz. se ha querido  perpetuar  la impunidad, el perdón  y el olvido, desconociendo el pensar y sentir de las víctimas que con sus incansable labor por lograr  el  reconocimiento de sus derechos a la Verdad Real, la aplicación de la Justicia, proporcional a la  gravedad de los hechos, la Reconstrucción de la Memoria Histórica pilar de  la Reparación integral,  que  no se puede simplificar a un aporte simplemente económico que lo que hace es negar la  posibilidad de dignificar a las víctimas y rescatar su buen nombre, sus sueños, proyectos de vida y sus  aportes en la transformación para alcanzar una sociedad justa y en paz. Con la aprobación de la ley 975 del año 2005, Justicia y Paz. se ha querido  perpetuar  la impunidad, el perdón  y el olvido, desconociendo el pensar y sentir de las víctimas que con sus incansable labor por lograr  el  reconocimiento de sus derechos a la Verdad Real, la aplicación de la Justicia, proporcional a la  gravedad de los hechos, la Reconstrucción de la Memoria Histórica pilar de  la Reparación integral,  que  no se puede simplificar a un aporte simplemente económico que lo que hace es negar la  posibilidad de dignificar a las víctimas y rescatar su buen nombre, sus sueños, proyectos de vida y sus  aportes en la transformación para alcanzar una sociedad justa y en paz.